lunes, 10 de abril de 2017

BIOGRAFÍA DE LUIS CABALLERO MEJÍAS


Luis Caballero Mejías

Información personal

Nacimiento        12 de diciembre de 1903
Fallecimiento    12 de octubre de 1959 (55 años)
Residencia          Venezuela
Educación
Alma máter        Escuela de Artes y Oficios de Santiago de Chile
Información profesional

Área      Ingeniería
Distinciones      
• Orden de Andrés Bello
• Medalla de honor "27 de junio"
• Medalla de honor de Instrucción pública
• Capitán honorario del cuerpo de Bomberos de Caracas
• Presidente honorario del Colegio de Peritos y técnicos de Venezuela


    Luis Caballero Mejías Paz (Caracas, 12 de diciembre de 1903 - 12 de octubre de 1959) fue un ingeniero y profesor venezolano, dedicado a la investigación y la docencia en Venezuela a mediados del siglo XX, dejando importantes legados en el campo de la investigación.

     Fue también el creador de la harina de maíz precocida, principal alimento de Venezuela.

   Inició sus estudios primarios en el Colegio francés de Caracas y en 1925 parte hacia Chile, ingresando en la Escuela de artes y oficios de Santiago de Chile, donde se licencia como ingeniero mecánico en 1929. Posteriormente completaría su formación en los Estados Unidos.


Carrera Profesional

   A su regreso a Venezuela, fue nombrado ingeniero jefe de los astilleros de Puerto Cabello, lugar donde comenzaría también su carrera docente enseñando, formando en las técnicas del oficio a los jóvenes trabajadores que tenía a su cargo. Posteriormente sería nombrado jefe de ferrocarril en Santa Rosa (Quebrada Honda (Caracas)) y en 1937 fundaría en Caracas la Escuela Técnica Industrial de Venezuela que más tarde recibiría el nombre de su fundador, Escuela Técnica Industrial “Luis Caballero Mejías” (actualmente Facultad de ciencias de la Universidad central de Venezuela).

    En 1958 fue nombrado responsable de la Dirección de educación artesanal, industrial y comercial (DARINCO) desde donde promovió una reforma educativa del país, fomentando las enseñanzas técnicas a través de la creación de escuelas de oficios, escuelas técnicas de agricultura, escuelas artesanales e institutos de comercio, entre otras.

Legado

   Debido a su trabajo en el campo de la investigación técnica y la enseñanza, el estado Venezolano creó la Universidad nacional experimental politécnica UNEXPO. Tres ciudades se ofrecieron para el establecimiento de esta universidadː Caracas, Ciudad Guayana y Barquisimeto; siendo escogida esta última como sede principal gracias a la campaña realizada por la Sociedad de amigos de Barquisimeto (S.A.B.) con el apoyo del entonces Gobernador del estado Lara y de diversos medios de comunicación.

    El 22 de septiembre de 1962 aparece en la Gaceta oficial de la República de Venezuela # 26958 el decreto # 864 donde se crea el Instituto politécnico superior con sede central en Barquisimeto, en su honor el Vice-rectorado Caracas (fundado el 23 de enero de 1974) lleva el nombre de "Luis Caballero Mejías" .

Harina de maíz precocida


    La harina precocida de maíz es el ingrediente fundamental de las arepas, un plato básico de la cocina venezolana y colombiana. Antiguamente el procedimiento para procesar el maíz hasta hacerlo apto para este uso (maiz pilado) era muy complicado e implicaba una serie de laboriosos pasos para quitar la cáscara y el lumen (la parte germinal) de los granos.


  El ingeniero mecánico venezolano Luis Caballero Mejías, inventó en 1954 el procedimiento industrial respectivo para su propia empresa La Arepera, C.A, El día 4 de junio de 1954, la Dirección de Comercio de la propiedad Industrial y Comercial del Ministerio de Fomento de la República de Venezuela, concedió la patente 5176 5 para procesar la harina de maíz, cuya patente sería comprada por el empresario Lorenzo Mendoza Fleury, quien con ella comenzaría a producir y comercializar la que seria conocida después como Harina P.A.N..

BIOGRAFÍA DE JACINTO CONVIT

Jacinto Convit 


      Caracas, 11 de septiembre de 1913 – ibídem, 12 de mayo de 2014. fue un médico y científico venezolano, conocido por desarrollar la vacuna contra la lepra. Recibió el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica de 1987 y fue nominado al Premio Nobel de Medicina en 1988. Falleció a la edad de 100 años.1 2

     Nació en Caracas, en la populosa parroquia de La Pastora, el 11 de septiembre de 1913, hijo de madre venezolana, Flora García Marrero, de origen canario y un español de origen catalán, Francesc Convit i Marti, naturalizado venezolano.


Educación formal y contribuciones


      Inició sus estudios en el Liceo La Guaira, "Andrés Bello", siendo alumno destacado de Rómulo Gallegos en la cátedra de Filosofía y Matemáticas, de quien afirmó:

       Qué buenos recuerdos, un profesor ejemplar de talante visionario.
Sus calificaciones, le hicieron merecer menciones honoríficas en asignaturas como fisiología y anatomía humana, clínica médica y clínica quirúrgica entre otras. Años después de empezar a destacarse como científico, expresó que:
"Estudiábamos mucho, con gran intensidad y había mucho que memorizar. Hubo una época en la que llegué a sentir una especie de cansancio. El número de horas que había que estudiar era grande".

     En 1932 ingresó a la escuela de Medicina de la Universidad Central de Venezuela (UCV) donde obtuvo el título de Doctor en Ciencias Médicas en 1938. Se especializó en dermatología en los Estados Unidos. Como integrante del equipo médico del Leprocomio de Cabo Blanco (estado Vargas) se dedicó al tratamiento clínico contra la lepra, mientras en la colaboración con el Dr. Martín Vegas iniciaba en la vecina comunidad del litoral central una campaña educativa destinada a erradicar la creencia colectiva de contagio de dicha enfermedad por simple convivencia con los leprosos. Su creciente experiencia en el tratamiento e investigación de la lepra le permitió relacionarse con otros especialistas extranjeros, llegando asistir como delegado de Venezuela al Congreso Panamericano de Lepra celebrado en 1946 y al Congreso Internacional de Lepra que se llevó a cabo dos años después, en 1948.

       Tras obtener por oposición la plaza de médico dermatólogo en el Hospital Vargas de Caracas, se incorporó a la cátedra de dermatología del profesor Leopoldo Briceño Iragorry, siendo nombrado instructor y director de su laboratorio. Jacinto Convit desempeñó este cargo hasta 1950, fecha en que fue nombrado jefe de Clínica Dermatológica.

Reconocimientos a su Carrera


         En 1971 Convit fue nombrado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) Director del Centro Cooperativo para el estudio Histológico y Clasificación de la Lepra, dirección que continuó desempeñando, hasta antes de su fallecimiento.

    En 1968 fue nombrado Presidente de la Asociación Internacional de la Lepra (International Leprosy Association) y reelecto en 1973, también fue designado presidente de la International Journal of Leprosy Corporation. En 1976 fue electo director del Centro Panamericano de Investigación y Adiestramiento en Lepra y Enfermedades Tropicales.

         En 1980, ingresa como individuo de número en la Academia Nacional de Medicina de Venezuela. Por su larga y fructífera trayectoria científica recibió numerosos reconocimientos nacionales e internacionales, entre ellos, el Premio Nacional de Ciencias en la especialidad de medicina, otorgado en 1980 por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICIT).

         Desde su llegada a Cabo Blanco, Convit no descansó hasta obtener la vacuna contra la aciaga enfermedad. Gracias a sus trabajos, Venezuela se transformó en un centro de entrenamiento en lucha antileprosa. Ello le valió en 1987 el Premio Príncipe de Asturias en su mención científica y técnica, galardón concebido por el gobierno de España a las personas e instituciones iberoamericanas que han hecho significativos aportes en beneficio de la humanidad. También la nominación al Premio Nobel de Medicina en 1988, y en 2002, el otorgamiento por parte de la Organización Panamericana de la Salud del título “Héroe de la Salud Pública de las Américas”. Convit es considerado uno de los más importantes científicos del mundo.

       En el año 2013 los diputados de la Asamblea Nacional venezolana aprobaron por primera vez un proyecto de reconocimiento a sus trabajos, con motivo del centenario de su nacimiento y por su obra, que incluye sus logros científicos a favor de la salud del pueblo venezolano y del mundo, por su dedicación al ejercicio de la medicina sin fines lucrativos y de enriquecimiento personal. Igualmente, los diputados del parlamento venezolano indicaron que se debía “solicitar el Premio Nobel de la Medicina al Dr. Jacinto Convit para reconocer su labor científica y los aportes que ha preservado para la salud de los pueblos del mundo”.4 5

          Fue amplia la carrera y proyección de la obra del Dr. Convit a nivel internacional. En la actualidad el Instituto de Biomedicina recibe becarios enviados por la OMS/OPS provenientes de América, África y Asia.

Avances en la lepra


        En 1937, el doctor Martín Vegas, conocido pionero en los estudios sobre la lepra, invitó a Convit a visitar la vieja casona del lazareto de Cabo Blanco en el estado Vargas, donde se alojaban cientos de pacientes afectados por lepra o lacería. En 1990, Convit escribía que su permanencia en Cabo Blanco fue enriquecedora en el plano personal y profesional.

         "Aprendí a cuidar a los pacientes desempeñando labores de médico, juez, odontólogo y consejero, que sirvieron ampliamente para enriquecer mi conocimiento sobre la enfermedad y profundizar sobre el aspecto humano de los enfermos"
En aquel tiempo esta enfermedad era todavía motivo de prejuicios arraigados socialmente; a los leprosos se les encadenaba y eran custodiados por autoridades policiales, imagen que definiría el carácter humano de Convit, quien ante tal maltrato, exigió a los guardias un mejor proceder con los enfermos.

         Luego de varias investigaciones con el único remedio empleado en estos pacientes, el aceite de Chaulmoogra, pudieron comprobar que el compuesto de Sulfota y Clofazimina podía fungir con gran efectividad en contra de este mal, lo que conllevó al cierre de las leproserías siendo Venezuela el primer país en implementar esta medida.

Vacuna contra la lepra (Enfermedad de Hansen)


         Jacinto Convit inoculó el bacilo de la lepra en armadillos de la familia Dasypodidae y obtuvo el Mycobacterium leprae, que mezclado con la BCG (vacuna de la tuberculosis), produjo la inmunización. Este notable aporte a la ciencia médica, le valió el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica de 1987, además de ser postulado en 1988 para el Premio Nobel de Medicina.

Creación de Institutos


         Luego de controlar la lepra y otras enfermedades endémicas, Convit se planteó el reto de crear un centro de investigaciones científicas. Así, nació el Instituto de Dermatología (antecesor del actual de Instituto de Biomedicina de Caracas), el cual dirigió desde 1972, y es desde el 2 de julio de 1973, la sede del Centro Internacional de Investigación y Adiestramiento sobre Lepra y Enfermedades afines de la Organización Mundial de la Salud. Allí, después de mucho esfuerzo conjunto y continuo, surgió la vacuna contra la lepra, que sirvió de base para la vacuna contra la leishmaniasis.

       En su trayectoria contribuyó a la fundación de diversas instituciones y asociaciones relacionadas con la labor médica, dentro y fuera de Venezuela. De esta forma, fue miembro fundador de la Sociedad Venezolana de Dermatología y Venereología, de la Sociedad Venezolana de Alergología y de la Sociedad Venezolana de Salud Pública.

Aportes


       Su más importante logro individual en el campo médico ha sido el desarrollo de una vacuna capaz de prevenir y curar la terrible enfermedad de la lepra, al que se agrega también al desarrollo (en equipo con sus colaboradores del Instituto de Biomedicina) de la vacuna contra la leishmaniasis cutánea. Convit también hizo importantes aportes en el conocimiento de enfermedades infecciosas, como la Oncocercosis y Micosis profundas.

Vida familiar

        En 1946, a los 33 años de edad, se casó con Rafaela Marotta D'Onofrio, de Caracas e italiana de origen, con quién tuvo cuatro hijos de los cuales viven: Francisco Convit, empresario radicado en Caracas, dedicado a la actividad agropecuaria y que ha tenido una destacada trayectoria en el hipismo poseyendo un stud y un haras; afición y propiedades, que por cierto, compartía con su padre. El Dr. Rafael J. Convit, cirujano plástico que reside en Washington DC y el Dr. Antonio Convit, profesor e investigador de la Universidad de Nueva York. Su hijo Oscar Convit falleció en el año 1978 y su esposa en el año 2011.

Fallecimiento


       El Dr. Jacinto Convit falleció el 12 de mayo de 2014 según informaron sus familiares. Los actos velatorios se realizaron en el Cementerio del Este el 13 de mayo de 2014. Luego de este suceso, le fue concedida la “Orden Libertadores de Venezuela” post-mortem, en su primera clase mediante decreto presidencial.

domingo, 2 de abril de 2017

LOS GRANDES INVENTOS DE LEONARDO DA VINCI



LA BICICLETA

    En 1490 se encontró en la obra “Codez Atlanticus”  el primer dibujo de que conocemos hoy en día como bicicleta. En el esquema se encontraban las dos ruedas que distinguen a este vehículo, un sistema de dirección y una transmisión de cadena.


EL HELICÓPTERO


   La estructura del tornillo aéreo inventado por Da Vinci es el primer antecedente de lo que hoy conocemos como helicóptero. Era un modelo de carcasa abierta, equipada con asientos y mandos para el piloto, que establecieron las bases de una tecnología que sería implementada muchos siglos después.


LA CALCULADORA

  Trazó las ideas con anotaciones y diagramas sobre una máquina calculadora que mantenía una relación de 10:1 en cada una de las ruedas registradoras.

EL AUTOMÓVIL


   El vehículo autopropulsado es uno de los diseños más adelantados a su tiempo. Un coche de madera que se accionaba por la interacción de muelles con ruedas dentadas. En 2004, los científicos del museo de Florida demostraron que el vehículo funcionaba justo como el pintor lo había deseado.


LA AMETRALLADORA


    Leonardo Da Vinci dibujó esta batería de artillería de rodadura alrededor del año 1480. Es una suerte de llamado a un principio guerrero sobre la necesidad de un ingeniero de guerra. El objeto posee una manivela se ajusta la elevación y varias cargas.


TRAJE DE BUCEO, ESCAFANDRA



    Cuando vivio en Venecia, a Leonardo se le ocurrió una curiosa idea para repeler las embarcaciones enemigas, enviar hombres con trajes que permitieran respirar bajo el agua y que hiciera agujeros en los barcos enemigos. Los buzos de da Vinci habrian llevado mangueras conectadas a una campana que flotaba llena de aire, usando mascaras con anteojos de vidrio, para ver bajo el agua.

EL PARACAÍDAS




       La velocidad con la que un cuerpo cae depende de 2 factores: la fuerza de la gravedad que lo atrae, y la resistencia de la atmósfera en la cual esta cayendo. Si no hubiera atmósfera un cuerpo simplemente acelerará mas y mas y mas hasta que chocara contra la superficie, pero el aire tiende a bajar la velocidad hasta llegar a la llamada velocidad terminal. Diferentes objetos tienen diferentes velocidades terminales, por ejemplo un la VT de un humano cayendo en la atmósfera terrestre es de 193.1 km/h, igualmente eso es, para sorpresa de muchos, muy lento (aunque con esa velocidad te haces pure contra el piso).. en fin, la idea del paracaídas es reducir la VT de una persona para así lograr que un salto de 3000 mts sea posible. da Vinci, que estaba fascinado con la idea de volar, diseño el paracaídas con la idea de que la gente pudiera pasear en el aire.


CONOCIMIENTO CIENTÍFICO


   El conocimiento científico es el conjunto de hechos verificables y sustentados en evidencia recogidos por las teorías científicas, así como el estudio de la adquisición, elaboración de nuevos conocimientos mediante el método científico. Una teoría científica es un conjunto consistente y deductivamente completo de proposiciones científicas que describen hechos relativos al campo de investigación de la teoría. En ese sentido el conocimiento científico sería el contenido proposicional completo de todas las teorías científicas empíricamente adecuadas.


CONOCIMIENTO


     Es el entendimiento, inteligencia, razón natural. Aprehensión intelectual de la realidad o de una relación entre los objetos, facultad con la que nos relacionamos con el mundo exterior. Conjunto de saberse sobre un tema o sobre una ciencia.

 La adquisición del conocimiento está en los medios intelectuales de un hombre (observación, memoria, capacidad de juicio, etc...) A medida que crece el conocimiento se da tanto el cambio cualitativo por haber en ello un incremento de reorganización del conjunto y de adquisición de los mismos.

    Parte de la filosofía que analiza las facultades cognoscitivas del hombre y su capacidad de captar la realidad en sus diversas manifestaciones es más que una disciplina filosófica general, esta no se ocupa de una vedad particular de algún campo de la ciencia sino que se ocupa del cuerpo de las verdades cognoscibles. Es el conjunto de principio que por su explicación sistemática, se determina el modo de conocer los aspectos de la realidad el cual abarca desde su reflejo superficial hasta el dominio de las leyes que rigen sus fenómenos.

  Sin embargo existen muchas perspectivas desde las que se puede considerar el conocimiento; siendo la consideración de su función y fundamento, un problema histórico de la reflexión filosófica y de la ciencia. La rama de la  filosofía que estudia el conocimiento es la etimología o teoría del conocimiento. La teoría del conocimiento estudia las posibles formas de relación entre el sujeto y el objeto. Se trata por lo tanto del estudio de la función del entendimiento propia de la persona.

CIENCIA



      La ciencia es un sistema ordenado de conocimientos estructurados que busca la interpretación y el porqué de los fenómenos naturales y artificiales. Los conocimientos científicos se obtienen mediante observaciones y experimentales en ámbitos específicos. A partir de estos se generan preguntas y razonamientos, se construyen hipótesis, se deducen principios y se elaboran leyes generales y sistemas  organizados por medio de un método científico.
  La ciencia considera y tiene como fundamento las observaciones experimentales. Estas observaciones se organizan por medio de métodos, modelos y teorías con el fin de generar nuevos conocimientos. Para ello se establecen previamente unos criterios de verdad y un método de investigación. La aplicación de esos métodos y conocimientos conduce a la generación de nuevos conocimientos en forma de predicciones concretas, cuantitativas y comprobables referidas a observaciones pasadas, presentes y futuras. Con frecuencia esas predicciones pueden formularse mediante razonamientos y estructurarse como reglas o leyes generales, que dan cuenta del comportamiento de un sistema y predicen cómo actuará dicho sistema en determinadas circunstancias.